A unos 18 kilómetros de Cuernavaca, Morelos se encuentra un pueblo mágico llamado Tepoztlán. Aparte de contar con hermosos paisajes estando en contacto con la naturaleza, es una zona conocida por ser el hogar de seres mágicos. Es muy visitado por cientos de turistas cada año para conectarse de su mística energía.
Cerca del pueblo, a simple vista se puede ver el cerro de Tepozteco, un lugar reconocido por su infinidad de leyendas, y aunque unas son muy interesantes, otras pueden llegar a ser hasta escalofriantes…
Sus habitantes más antiguos, cuentan la leyenda que hace muchos años atrás se habían presenciado avistamientos de enormes bolas de fuego, volaban alrededor del cerro y aunque éstas pasaran entre los árboles, estos no se prendían en llamas.
También fue la época en que muchos bebés desaparecían, por lo que varios curanderos decidieron tomar medidas drásticas e investigar sobre los casos, pero lo que descubrieron fue algo muy aterrador…
Pues se trataba de brujas come niños acechando al pueblo, entonces decidieron alertar a los lugareños avisándoles que como manera de protección colocaran ajo en las puertas de sus hogares, ya que esto evitaría que ellas pudieran entrar.
Gracias a esto las desapariciones fueron disminuyendo y la gente pudo notar que las bolas de fuego que aparecían en el cerro fueron desapareciendo poco a poco hasta que solo quedó una…
Era la bruja mayor y la más poderosa, ella tomó venganza contra todos los curanderos del pueblo, enviándoles terribles enfermedades que ni ellos mismos podían curarse, hasta que al final perdían la vida.
Pero no solo la bruja era poderosa, también en el pueblo habitaba una chamana con poderes increíbles y enojada por la perdida de sus amigos, decidió enfrentar a la bruja, pero antes de hacerlo debía cargar todas sus energías para derrotarla y protegerse del mal que pudiera enviarle.
Hasta que llegó el día en el cual la chamana estaba preparada para enfrentarla, fue entonces que decidió ir hacia el cerro de Tepozteco, donde se encontraría con la bruja maligna.
Pasaron las horas y nadie sabía de la chamana, sin embargo se percataron que una nube intensamente negra cubrió el cielo haciendo una fuerte tormenta.
La causa de ésta era la lucha de poderes, la chamana contra la bruja. La gente decidió marchar al cerro en su afán de ayudar llevando con ellos antorchas, palos y machetes.
Finalmente, la bruja quedó acorralada por todos ellos y en un intento desesperado por huir, chocó fuertemente contra un muro de piedras del cerro, el cual terminó por derrumbarse, dejándola aplastada.
Se dice que los restos de la bruja siguen ahí, y gracias a la chamana que hizo sus oraciones, la dejó atrapada para que su alma no volviera a tomar venganza.
Actualmente, hay quienes dicen haber visto bolas de fuego volar por ahí, incluso muchas personas han acudido a investigar y cuentan que han logrado percibir ruidos extraños, voces y sombras misteriosas.
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