El tema de los asesinos en serie vuelve a flote con la tendencia actual, por lo que era cuestión de tiempo que uno de los casos más destacables de la historia saliera a colación. Como no puede ser de otra manera, hablamos de los asesinatos en el barrio londinense de Whitechapel, por cuenta del denominado “Jack el Destripador”. A día de hoy existen muchas teorías alrededor de esta masacre, por lo que hablaremos de uno de los libros que mejor plasma los hechos del caso.
Nos referimos a la obra de Yvan Figueras y Tamara Mingorance, “Jack el Destripador: caso abierto”. A través de este libro investigativo, los autores ofrecen todos los datos relacionados al crimen sin resolver de 1888.
Lejos de ofrecer una resolución final acerca de la misteriosa identidad del perpetrador, los autores del libro colocan al lector en la piel de un detective a medida que van brindando una lista de teorías, sospechosos y motivos. Si todavía no lo has leído, te invitamos a acompañarnos en esta revisión de Jack el Destripador: caso abierto.
¿De qué trata el libro de Jack el Destripador: caso abierto?
A través de un estilo divulgativo y directo, los autores presentan de manera ordenada y bien documentada los testimonios, declaraciones, evidencias y noticias de la época. Además, presentan un marco de sospechosos y víctimas, relacionados con Jack el Destripador, con el fin de reducir un poco más el número de posibilidades acerca de la identidad del asesino.
Para comenzar, el libro plasma el contexto histórico de la época, así como la descripción completa sobre East Side, es decir, la zona más pobre y peligrosa del Londres victoriano. Esta misma zona fue en la que Jack el Destripador asesinó a sus anchas a 5 prostitutas entre agosto y noviembre de 1888.
Sumado a eso, Figueras y Mingorance hablan sobre la identidad de las víctimas del asesino y como las condiciones sociales las llevaron a una situación vulnerable. Hablamos de una época machista y puritana que empujó a muchas de las mujeres a recurrir al alcohol, la prostitución y la indigencia. Como consecuencia, las convirtió en el objetivo principal del asesino en serie, Jack el Destripador.
Víctimas oficiales de Jack el Destripador
Lejos de lo que se crea, el impacto de este caso va más allá de la cantidad de víctimas, sino de los hechos que imposibilitaron el descubrimiento de la identidad de Jack el Destripador. A pesar de que existan asesinos con un mayor índice de muertes, debemos destacar que las 5 víctimas de este caso tuvieron lugar, aproximadamente, en 2 meses.
Hay investigadores que atribuyen otras muertes a este mismo asesino. Sin embargo, de manera canónica, las autoridades confirmaron 5 mujeres, las cuales mencionaremos a continuación:
- Mary Ann “Polly” Nichols: Asesinada a las 3:40 de la mañana el viernes 31 de agosto de 1888. Cortes en la garganta y abdomen rasgado profundamente.
- Annie Chapman: Encontrada el 8 de septiembre, con dos días de muerta. Presentaba dos incisiones en la garganta, vientre apuñalado y útero extraído.
- Elizabeth Stride: Asesinada el 30 de septiembre, en la madrugada. Corte en la carótida, pero sin incisiones en el abdomen. Se cree que fue interrumpido.
- Catherine Eddowes: Asesinada el mismo día que Stride. De hecho, fue encontrada 45 minutos después. Tenía la garganta cortada, una incisión profunda y extensa en el abdomen. Extrajeron el riñón izquierdo y parte del útero.
- Mary Jane Kelly: El cadáver fue encontrado mutilado y destripado en su recámara en la mañana del 9 de noviembre. Presentaba un corte que iba desde la garganta hasta la espina dorsal. Además, todos sus órganos fueron extraídos.
Teorías sobre quien era Jack el Destripador
El libro de Figueras y Mingorance señala como existe una amplia lista de sospechosos, desde los más fundamentados hasta los más dudosos. Uno de estos, gira en torno a George Chapman, el Príncipe Albert Víctor Christian Edward, el pintor Walter Richard Sickert e, incluso, Lewis Carroll, el escritor de “Alicia en el país de las maravillas”.
Por otro lado, también se le atribuye la identidad de Jack el Destripador a una mujer, a la que se le denominó “Jill la Destripadora”. Con esto se buscaba designar a una posible sospechosa o a un hombre que vestía de mujer para ocultar sus crímenes.
En cuanto a esta teoría, hay que destacar que fue compuesta por Sir Arthur Conan Doyle, el creador de la saga de libros de Sherlock Holmes. Aparentemente, solo así, el asesino podría andar por las calles, manchado de sangre, sin levantar sospechas.
Hay que destacar que, hasta la actualidad, existe una lista de, por lo menos, 22 sospechosos. Al mismo tiempo, siguen surgiendo nuevas teorías de la mano de autores e investigadores, ofreciendo una “última resolución”. Lamentablemente, mientras más tiempo pasa, más difuso se vuelve el caso.
De cualquier forma, coméntanos ¿Cuál crees que sea la verdadera identidad de Jack el Destripador? ¿Crees que se trató de una única persona o contaba con ayudantes o seguidores? ¿Fue un hombre u otra mujer? Y, por último, ¿crees que algún día se descubrirá la identidad de uno de los asesinos en serie más enigmáticos de la historia?
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